Las expresiones de rebelión usadas a lo largo de la vida de la juventud y el movimiento del Rock 'n Roll fueron muy importantes, así que fueron utilizados por las compañías para tratar de complacer sus necesidades mientras trataban de disipar algunas angustias en el ambiente. En orden de conectar con éxito a la juventud, estas empresas musicales y cinematográficas supusierrón la gran importancia de adherirse a este movimiento. Aun cuando los nombres de esos primeros grupos de rock, contratados por Orfeón, tenían nombres "desafiantes", Orfeón fue de aquellas pocas empresas que trataron de promover valores familiares, morales, académicos y otros de menor importancia. Aun así, su fórmula visual de presentar estos primeros grupos en conciertos, discos y películas, fue siempre positivo y profesional.

Los Rockin Devil's rápidamente fueron absorbidos por un grupo de oyentes quienes rápidamente los aceptaron como su propia expresión de Idolos de rock and roll. Con este nuevo fenómeno, Orfeón rápidamente explotó la imagen de sus nuevas bandas y aparecieron en Televisión a lo largo del país, comprando "tiempo aire" de la televisora para producir sus programas televisivos como en los Estados Unidos. La transmisión presentaba diversos artistas como Bill Haley, seguido de bailarinas en un estudio con diseños "A Go Go", en donde los grupos bailarían y cantarían haciendo "playback" a sus éxitos, rodeados de bellas y jóvenes chicas quienes bailarían y se convulsionarían al ritmo de sus melodías.

Los Rockin Devil's hicieron su primer debut cinematográfico a mediado de los sesenta, o al menos su música lo hizo. Juventud sin Ley fue dentro de estos primeros trabajos, donde se retrataban los primeros signos de alejamiento familiar y se aceptaban las influencias del extranjero. Y entre estos se encontraba la música de Rock, y se le consideró una influencia dañina, ya que se mostraba a los estudiantes utilizando su tiempo libre para irse a bailar a un "club" o café cantante de la época. Aún así, la ironía entre estas películas fue que la música al final, era el elemento que unía a todos al final del filme; Rocanrol es, al final, el "conteo a diez" proverbial, cuando el odio y la tensión parecen disíparse, y se empieza a desenterrar lo perplejo de la vida. Este es el tema recurrente, durante todas las películas en las que aparecieron Los Rockin Devil's, donde la solución a los problemas mundiales, se resolvían en cooperación con la música.

A partir de su aparición en la película Juventud Sin Ley, Los Rockin Devil's aparecieron en tres películas más, como actores. Situados en clubs "A Go-Go", aparecieron en películas como Amor A Ritmo De Go-Go, probablemente considerada su mejor película, actuando junto a artistas de la talla de Javier Solís y Rosa María Vásquez en una cómica historia de amor puesta en contra del cierre de un club de música "go-go". Después aparecieron en Las Tigresas, una película del estilo de los "Angeles de Charlie" donde las protagonistas, eran tres bellas espías, un doctor inexplicablemente siniestro (Dr. Klux), y tres ridículos robots, quienes tenían cada uno una "K" en sus trajes deportivos (K-K-K) y quienes constituían el clan del Klux. En su tercera película, protagonizada por Leonorilda Ochoa y "Chelelo" García, son una pareja que reciben un edificio elegante como parte de una herencia de un tío lejano y se refleja su pelea por convertir ese edificio como un enorme club "a go-go" o en una arena de lucha libre. Los directores, tratando de ahorrarse un dinero en costos de producción, grabaron estas dos películas al mismo tiempo y usaron las mismas escenas de Los Rockin Devil's para ambas películas.